domingo, 29 de julio de 2012

Entre tanto y tanto te encontré

39 de fiebre. 2 ibuprofenos y 3 sangrías. Despedida de una de mis mejores amigas. Sentimiento de impotencia. Angustia. Miedo. Dolor. Pena.
Un cúmulo de secretos que sólo confesaré a mi blog.
Hoy, por fin, asimilo que mi futuro está en mis propias manos. Que soy yo quien pongo principio y fin a mis aventuras, que soy yo quien deja entrar y salir a gente de mi vida. Que sigo siendo yo al anteponer el corazón a la cabeza. Suelo escuchar eso de que cuando estás baja anímicamente es cuando mejor escribes. Cuando se sufre, cuando se llora, cuando se pierde a alguien increíble o tiras por la borda una oportunidad única. Hay veces que lo bordas, y veces que lo tiras por la borda.
Y no sé si será cierto lo que digan o dejen de decir, no sé si hoy escribiré mejor que nunca, o si simplemente soy esa de siempre con algo atravesado en el corazón. Quizá lo que escribo forma parte de una estrella estrellada, o quizá simplemente me he acostumbrado a leer las mismas frases con distintas palabras una y otra vez. Quizá me he aburrido de mi misma. De mis quejas, de mis inútiles gritos en la oscuridad, de decir pero no actuar... Tengo tantos defectos que sólo el reprochar los de otros me hace sentir más segura de mí misma. La incomprensión, las dudas, los rechazos. Todo lo que describe este blog es tan absurdo que ni mis propios ojos son capaces de verlo cuando hecho la vista atrás.
Y sin embargo aquí estoy, derrochando la poca energía que le queda a mi cuerpo esta noche para rogarle silencio a todos mis recuerdos, para suplicar, entre lágrimas, que mi cabeza deje de proyectar diapositivas donde aparezca su imagen.
Mi debilidad, mi punto de inflexión, mi cáncer más ambiguo. Todo lo que relexiono entre guiños y susurros, lo que demuestro entre miradas y caricias. Todo eso que no te doy y que mis sueños se empeñan en recordarme desde el día que te conocí.
Y es que en ese momento cambiaste mi vida. Dejé de ser yo, de describirme, de conocerme, para centrarme en describir y conocerte a tí.
Pero da igual.. da igual. Son sólo delirios, pequeños cuentos. Aventuras. Hechos y deshechos que cambiarán mi vida y arrasarán con mi personalidad. Momentos. Todo lo que he escrito y dejaré de escribir cuando ya no te recuerde.
Porque mi vida siempre gira en torno a esa persona que ni es, ni quiere ser. Esa rareza, esa originalidad. Ese juego de palabras.

"Love, is the only way."

viernes, 27 de julio de 2012

Arrepentirse significa tardar en rectificar.

Aunque no quieras entenderlo, ni yo me sepa expresar. Aunque no quieras verlo y yo me empeñe en mirar por tí. Aunque tú no lo sepas, aunque yo no lo intente.
Siempre quise guiar mis ilusiones y emociones por caminos correctos, por caminos donde sabía que sólo yo llegaría a controlarlos. Intenté que el realismo se apoderase de mis sentimientos, dejar de soñar para lograr encontrar una estabilidad. Lo logré, y he perdido a lo que más quiero.
Incapaz de mantener lo más sencillo, de cuidarlo, de tratarlo como merece. Arañando segundos de las horas, minutos de los días, arañando palabras de tus recuerdos más profundos. Recuerdos que sólo has sido capaz de susurrarme a mí. Y ha hecho falta una experiencia que ha cambiado mi vida, para decirte que:
Lo siento. Debería haber luchado por tí. Debería haberte ido a abrazar cuando me lo pediste, haberte dado los besos y caricias cuando los reclamabas. Debería haberme comido el miedo, haber puesto nuestro amor por bandera. Debería haberme dado cuenta de que un futuro mejor profesional no será un futuro mejor si no te tengo a tí a mi lado. Debería haber sabido que sólo contigo me hubiese comido el mundo, que juntas podríamos con todo. Y nunca debí tirar la toalla.

Sé que llego tarde. Que no me merezco perdón, y que ya da igual que lo pida, porque ni aún hoy podría cambiar lo que hay ya escrito en mis próximos cuatro años. Igual no era el momento, pero igual no hay otro momento. Igual no vendrá ese día en que nos crucemos y vivamos por fin como nos merecemos: A menos de dos centímetros.

Si perdí mi oportunidad, viviré con ello. Arrepentirse significa tardar en rectificar, y yo asumo, a la vez que rectifico, cuando te digo que en lo más profundo de mí, hasta en mis sueños, sólo grito querer pasar el resto de mi vida a tu lado.

miércoles, 25 de julio de 2012

Memorias rumanas

Arion, Florin, Vanessa, Cristi, Ionela...
Cualquier descripción, palabra, conversación o imagen sobre ellos quedaría corta. Niños sin nada, sin familia, con deformes físicos increíbles... y siempre una sonrisa en la cara.
Me han enseñado a apreciar, a vivir, a luchar y sentir que puedo con todo. Me han demostrado que si la vida no es suficientemente justa para mí, el poder ir a visitarles me sacará de cualquier duda ante cómo debo aprovechar o no aprovechar lo afortunada que soy. Les he dejado mi corazón para que lo abracen por las noches y no se sientan solos, mi promesa de que volveré para regalarles todos esos momentos que ya hemos vivido este año. Tantos abrazos, tantas risas. Tanto.
Qué injusta es la vida. Yo sólo espero que sus padres, esos que un día abandonaron a esos ángeles, estén recibiendo su merecido.
Os amo niños, cuidad de mi corazón porque seréis mi razón por la que luchar en la vida.




Mis dos ángeles, Cristi y Ionela... volveré. Ya soys parte de mí.


Y por supuesto... he dejado un amor en Rumanía. Debo de ser la persona más enamoradiza del mundo, no puedo estar más de dos semanas sin fijarme en alguien. Es de esas personas inmensamente buenas pero inmensamente serias. Arrancarle una sonrisa era sentir que me podía comer el mundo... pero si se la arrancaba reía a carcajadas como si no hubiera un mañana. Qué grande... volveré a por tí el año que viene, tú sólo esperáme y manten esa parte soñadora que sólo juntas desarrollábamos.

lunes, 9 de julio de 2012

Próximo destino: Rumanía (Orfanato House of Angels)

No hay nada mejor que una despedida con la mejor persona, vivir el último día antes de un viaje que cambiará mi vida con la sonrisa más sincera que jamás conoceré. Y siempre estaré aquí, tenga que coger mil trenes, horas de autobuses, sólo quiero que sepas que siempre estaré dispuesta a hacer lo que sea por no perder el contacto. Ha sido un día maravilloso. Mientras el sol animaba a nuestras risas a iluminarse, como niñas, jugábamos a tirarnos arena en el suelo. Hemos dado ese paso que tanto tiempo llevamos esperando para dar. Y sólo quiero que te cuides, que te dejes cuidar y que disfrutes de tus vacaciones como te mereces. Ha sido un año duro, pero juntas lo hemos superado.
Gracias, por seguir ahí, por perdonarme mil veces, por quererme, por dejarme formar parte de tu vida.

Y ahora toca Rumanía, una experiencia dura pero seguro que gratificante. Desconectaré de todo, no me preocuparé más que por sacarle una sonrisa a esos niños que no tienen nada, que sus razones para reir a carcajadas están todas en sentimientos, en el corazón. Qué bonito.. Qué ganas.. Hasta el 24 escritura.

sábado, 7 de julio de 2012

Yo estoy aquí de paso.

Me gusta tu sonrisa, tu forma de ver la vida, tus ojos, tu mriada.. Me gusta tu egoísmo, tu parte mala, ese blanco y negro desteñido. Me gusta que me gustes, y dormir abrazada a la almohada, sabiendo que en sólo 4 años saldré a buscarte, y mi imaginación morirá a tu lado porque ya siempre serás mi compañera de sueños. Ese pasillo se me hace aún, a día de hoy, indescriptiblemente imborrable. Es infinito, vaya palabra más absurda, no? Infinito. Porqué hay que ponerle nombre hasta a lo incalculable? Hay que expresar siempre todo con palabras?
A mí me conquistó algo que no sabría describir jamás. Ese metro de distancia, ese beso tan soñado, que yo nunca me atreví a darte y que lograste tatuar en mis labios. Y no hay más que ver como nada te satisface, como eres una constante queja. Son breves tus dos mnutos de felicidad antes de dormir. Sigue soñando conmigo como hago yo todas las noches. Sigue imaginando, cerrando los ojos y rozándome. No eches de menos mis caricias, no faltaré a mi palabra, lo nuestro es algo único.. "Es demasiado especial". Mientras sigo andando sin rumbo mi subconsciente se encarga de echarte de menos. Pero no luché por tí, es cierto. No puedo decir en alto lo que siento porque sería gritar una mentira, porque nunca lograré decir la palabra con la que un día me describiste, "cobarde".
Es... sentir como quema. Sentir que cada noche cierro los ojos y te veo delante de mí, siento como me miras dormir, me apartas el pelo mientras observas cada movimiento que provoca mi cuerpo dormido. Nos veo caminando, consiguiendo que Madrid se nos haga pequeño, sabiendo que jamás tendremos meta.
Quiero pasar el resto de mi vida a tu lado, y sé que si comenzamos ahora estropearemos lo más bonito que nos podría pasar. Esa es mi razón. Está llena de miedo, de palabras vacías, y de comprensión hacia tu parte incrédula. Pero volveremos a encontrarnos: Mismos cuerpos, mismas manos, mismos ojos.. mismos besos.